Calabaza cocida, una forma sana y fácil de mejorar tu dieta.
Estamos en pleno otoño, caen las hojas, los días se tornan más grises, los paisajes se dibujan dorados y llega la tan esperada temporada de calabazas, y es que estamos ante un alimento que además de deleitarnos con su delicioso sabor nos reporta un sinfín de nutrientes para nuestro organismo y propiedades beneficiosas para nuestro cuerpo.
La calabaza es un fruto que obtenemos de la calabacera, generalmente de grandes proporciones, con cáscara dura que va desde el color anaranjado más intenso al verde o amarillo. Mucha pulpa en su interior, de carne tierna y jugosa estamos ante un superalimento que llega a nuestras casas para quedarse en nuestras neveras, y si además nos la ofrecen directamente cocida, jugamos con ventaja.
Nos encontramos ante un aliado perfecto a la hora de cuidarnos, además al partir de calabaza cocida previamente nos ahorramos un valioso tiempo en la cocina pudiendo así con un buena planificación adelantar trabajo a los fogones para disfrutar de otros menesteres acordes a este tiempo.
¡Vamos a ello!
Propiedades de la calabaza
La calabaza cocida, es una fuente extraordinaria de antioxidantes, carotenos, licopenos, vitamina C, fibra, etc. Todo un superalimento de este modo se va a convertir en nuestra aliada a la hora de entre otros:
Perder peso
Estamos ante un alimento con un bajo contenido en calorías (entre 30 y 40 calorías por cada 100 gramos) al mismo tiempo que dispone de una gran cantidad de agua, lo que la confiere el poder saciante deseado en todas las dietas de adelgazamiento. Disfrutar de un alimento delicioso sin culpa es posible con la calabaza cocida ¡y además sin apenas grasas!
Evita la retención de líquidos
Gracias a, como comentábamos más arriba, su gran cantidad de agua, es un potente diurético natural ya que el 90% de la calabaza es agua, lo que nos ayuda a eliminar toxinas y mantener nuestros cuerpos hidratados.
Aliada contra el estreñimiento debido a su gran cantidad de fibra
Lo que favorece el movimiento de los intestinos y con él la evacuación de heces, evitando así el estreñimiento y la acumulación de desechos en el organismo.
Salud de los ojos
Los betacarotenos de la calabaza cocida son los responsables de otorgarle el color naranja. Estos en el cuerpo se encargan de transformarse en Vitamina A, la responsable del buen funcionamiento de los ojos ayudando a la retina a procesar y absorber la luz.
Entre sus antioxidantes se encuentran también dos posibles aliados ante la degeneración macular y las cataratas, la luteína y la zeaxantina, así que a tomar mucha calabaza para cuidar de los ojos.
Salud de la piel
Gracias una vez más a los betacarotenos, que se encargan de evitar que los rayos UV nos causen estragos en la piel. La calabaza cocida es un antiarrugas natural en toda regla, prueba a hacerte una mascarilla batiendo la calabaza cocida con yogur natural, limón o miel, resulta espectacular.
Para tratar la diabetes
Sus hidratos de carbono, gracias a su alto contenido en fibra, se absorben lentamente, lo que hace que el nivel de glucosa en sangre sea constante.
En casos de anemia
La calabaza cocida posee una gran cantidad de hierro lo que nos ayudaría a la hora de paliar efectos de anemias o déficits puntuales de hierro, por ejemplo cuando las mujeres menstruamos, tras un parto o una donación de sangre.
Para la depresión y el insomnio
Gracias al triptófano, antidepresivo natural que el organismo convierte en serotonina, hormona de la felicidad.
En la prevención del colesterol
Su vitamina C, junto a los carotenos ayuda al sistema circulatorio, previniendo que el colesterol se adhiera a las paredes de las arterias.
Mejora nuestro sistema inmune:
como ya decíamos posee gran cantidad de vitamina C, gracias a la cual ayuda a nuestro organismo a defenderse de los ataques de virus y bacterias. No te olvides desde ahora que para ayudar a curar tu resfriado en esta época, otro gran aliado aparte del zumo de naranja de toda la vida deberá ser la calabaza cocida.
Digestiva
En casos de gastritis, acidez estomacal o digestiones difíciles, gracias a su efecto suavizante regenera y protege la mucosa intestinal, así que aunque sea un alimento con gran contenido en fibra, nos será de ayuda en estos casos.
En general estamos ante un superalimento que gracias a la gran cantidad de antioxidantes que tiene no debemos dejar de lado en nuestra alimentación. Está comprobado que una dieta alta en estos nutrientes favorece la salud y evita o retrasa la aparición de enfermedades de todo tipo.
Cómo consumir calabaza
Si os ha seducido la idea de incorporar la calabaza cocida a vuestra planificación de comidas, veréis lo sencillo que resulta, además de cómodo y rápido.
1. A la hora de cocer la calabaza necesitaremos un buen cuchillo para pelarla, como sabéis la corteza de la calabaza es bastante gruesa, así que aquí está lo más costoso del asunto. Una vez tenemos la calabaza pelada y limpia de semillas la haremos trozos.
2. Las semillas son un tesoro así que no las tiréis, podéis tostarlas y usarlas como topping en cremas o ensaladas y son una fuente muy rica de nutrientes.
3. Un consejo, a la hora de cocer un alimento, cuanto más pequeño lo cortemos más aceleramos el proceso de cocción y con ello además incrementamos el ahorro en la factura del gas-luz.
4. Una vez tengáis los trozos de calabaza limpia los ponemos a cocer en abundante agua hirviendo aproximadamente unos 20 minutos, dependerá del tamaño de los trozos. Podéis comprobar si ya está cocida a vuestro gusto pinchándola con un tenedor o puntilla. También podéis cocinarla en una olla rápida, durante unos 5 minutos y estará lista para comer.
Llegados a este paso tenemos nuestra calabaza cocida lista para comer y así beneficiarnos de todas sus bondades, no me digáis que no es una forma sana y fácil de mejorar tu dieta.
Si os queréis saltar este paso podéis optar por comprar calabaza cocida lista para consumir, como la de Huercasa, sin conservantes, aditivos y completamente natural. ¡Y ese tiempo valioso que nos ahorramos a los fogones!
Algunas ideas
¿Una ensalada en otoño? Pues sí, y además reconfortante y con productos de temporada, como es la calabaza cocida. Una ensalada templada de calabaza aliñada con vuestra vinagreta preferida y con ingredientes frescos. Tan sencillo como pasar por la plancha la calabaza ya cocida e incorporarla a nuestra ensalada.
O, ¿quizás prefieras un guiso otoñal? Añade a tus platos de cuchara tradicionales unos trozos de calabaza cocida y dales otro aire. Lentejas estofadas con calabaza, alubias blancas o pintas ¡a la calabaza todo le queda bien!.
Si eres de los que van con prisas y prefieres comer algo más rápido, ¿te has planteado hacer un bocadillo con calabaza? Un recurso original y delicioso. Mete entre pan y pan unos trozos de calabaza cocida, adereza con tus salsas preferidas, añade un poco de tomate fresco, lechuga, queso... ¡y pepinillos! veréis qué contraste.
En un arroz meloso, suave y delicado, añade calabaza cocida y unas setas y verás que delicia, o si lo prefieres incorpórala en un gran plato de pasta salteada, hará las delicias hasta de los más peques de la casa.
Como podéis comprobar hay todo un mundo de posibilidades detrás de la calabaza cocida y más allá de la tradicional crema de calabaza.
Recetas ricas ricas
Guiso especiado de lentejas rojas con calabaza
- 1 vaso de lentejas rojas
- 1 cucharadita de aceite de oliva virgen
- 200gr de calabaza pelada y cortada en cubitos
- 1/4 de cebolla picadita
- 1/4 pimiento verde picadito (opcional)
- 2 dientes de ajo picados
- 1/2 litro de caldo de verdura (o agua+pastilla de caldo sin glucamato)
- 1 pizca de sal marina
- 2 hojas de laurel
- 1 cucharadita de comino en polvo
- 1 pizca de pimienta negra molida
- 1 pizca de cúrcuma en polvo
- 1 pizca de jengibre en polvo
- 1 pizca de ras al hanout
- 1 trocito de alga kombu (para una mejor cocción de la legumbre y mejor absorción de los minerales)
- Semillas de sésamo tostadas (opcional)
En un perolo vamos a poner a rehogar el ajo, la cebolla, el pimiento y la calabaza, dejamos un par de minutos que se rehogue, añadimos las lentejas (previamente lavadas), removemos, añadimos el laurel, las especias y el alga kombu rehogamos un minuto, añadimos el caldo y dejamos cocer a fuego medio durante unos 20 minutos para que nos quede una lenteja melosa, probamos de sal y añadimos al gusto. Emplatamos sirviendo unas cucharadas de sésamo tostado por encima.
Y si es tan saludable, ¿podemos usarla en recetas dulces?
Desde un bizcocho, hasta una crema dulce pasando por un...
Flan de calabaza realizado con agar-agar y jengibre
- 200 gr. de calabaza cocida previamente
- 1 litro de bebida vegetal de avena (o la que uséis habitualmente)
- 10 gr. de alga agaragar en polvo
- 200 gr. de azúcar integral de caña (panela o el endulzante al gusto que consumáis)
- 1/4 de cucharadita de jengibre en polvo
Primero vamos a preparar la calabaza, cortamos un buen trozo, lo limpiamos, pelamos y troceamos en dados pequeños. La ponemos a cocer en el litro de leche de avena con el jengibre durante unos 35 minutos, o hasta que notéis que está blandita. Si partimos de calabaza cocida solo dejaremos que de un hervor para que tome sabor.
Una vez cocinada, la sacamos con una espátula y reservamos. En la leche añadimos el agar agar, en forma de lluvia, removemos y dejamos 2 minutos hervir.
Le añadimos la calabaza y la canela, removemos y pasamos por la batidora.
Por otro lado, en una sartén ponemos un puñado de azúcar integral de caña, un chorrete de agua y ponemos a hervir hasta hacer un caramelo que incorporaremos a las tacitas de nuestros flanes.
Tras poner el caramelo añadimos unos cazos de nuestro flan, metemos en el frigorífico y dejamos que enfríe. Solidificará y quedará buenísimo. ¿Os animáis a probar?
Otras alternativas
Ideas para que te animes a incorporar la calabaza cocida en tu día a día, sin miedo y sin preocupaciones, además de una forma rápida y sencilla:
- Dedica un día a la semana a preparar tu calabaza para toda la semana. Después de, algo menos de una hora de trabajo, tendrás calabaza cocida lista para en tus platos de forma cómoda y sin tener que limpiarla y cocerla en el momento, ahorrándonos así tiempo y quebraderos de cabeza, tan importante en el día a día en la cocina.
- Puedes conservarla cocida en trozos en la nevera perfectamente 5-6 días en un recipiente con cierre apto para conserva en frío. O si lo prefieres puedes congelar la calabaza cocida en porciones y así disponer de ella a tu gusto, sacándola previamente del congelador y dejando que se descongele poco a poco en la nevera.
Con todo el tiempo que te estamos ahorrando en la cocina no hay excusas para disfrutar de este superalimento que nos ofrece la madre naturaleza, sin duda una de las genialidades del otoño es poder disfrutar de la calabaza.
Y ese tiempo inviértelo en disfrutar de tu familia o de tus amigos, de salir a recoger hojas secas o castañas al monte, leer un buen libro o ver tu serie preferida acurrucado en el sofá, tú eliges.
Después de todo esto, ¿estaréis de acuerdo conmigo?, sin duda, la calabaza cocida, una forma sana y fácil de mejorar tu dieta.
¡A disfrutarla!