Crema de remolacha para mantener sano hígado y corazón
No pierdas detalle de nuestro artículo de hoy, en el que te mostramos la utilidad de la crema de remolacha para mantener sano hígado y corazón.
Además de contarte las propiedades nutricionales de este alimento tan rico y saludable, quédate hasta el final y anota nuestras recetas de crema de remolacha preferida.
Si bien podemos encontrar remolacha de diferentes variedades, entre las que más destacan son la remolacha blanca y la remolacha roja, ambas son muy consumidas en la actualidad, y de ellas aprovechamos tanto la raíz como las hojas.
Vamos a centrarnos en la remolacha roja, que es la que encontramos normalmente para consumo cotidiano, mientras que la variedad blanca suele ir destinada a la producción de azúcar o alimentación de ganado.
Desde tiempos remotos ya se consumía remolacha, aunque su auge viene a partir del siglo XIX, que fue cuando empezó a destinarse más en exclusiva a la industria azucarera y a la de la extracción de alcohol.
Es cuando nos centramos en sus propiedades beneficiosas para nuestra salud, cuando la remolacha roja gana en protagonismo frente a la blanca.
Propiedades generales de la remolacha
- Rico en flavonoides, lo que le hace útil para prevenir algunas enfermedades. Hay que destacar su gran riqueza en flavonoides, principalmente por la betaína, el pigmento rojo tan característico de la remolacha. Lo cierto es que es un alimento muy beneficioso para nuestro organismo y un potente antioxidante y está demostrado que el llevar una dieta rica y abundante en frutas y verduras es favorable ante la enfermedad y en el retraso o aparición de la misma. Los antioxidantes son los encargados de eliminar los radicales libres del organismo, los neutralizan y de este modo evitan que hagan daño en órganos, como hígado y corazón, nuestros protagonistas de hoy.
- La remolacha también es la aliada perfecta en casos de sufrir de anemia. Gracias a su gran cantidad de folatos (ácido fólico) vitamina B9, vitamina que solo se encuentra en los vegetales y que es fundamental a la hora de producir glóbulos rojos. Cuando tenemos déficit de glóbulos rojos estamos ante una anemia megaloblástica. A la hora de sintetizar mejor el hierro es recomendable mezclar este alimento con otro que contenga vitamina C (un chorrito de limón, por ejemplo, o tomar una mandarina de postre), para así aumentar la biodisponibilidad del hierro (por ejemplo, añadiendo unas gotas de zumo de limón a la remolacha u otro alimento rico en hierro). No se recomienda el consumo de remolacha junto al de otros alimentos ricos en hierro en casos de anemia, puesto que los unos a los otros se "robarían" y restarían minerales, haciendo el efecto contrario, lo recomendable es consumirla junto a alimentos ricos en calcio para evitar así estos efectos indeseados. También interesante el consumo de remolacha en mujeres con menstruaciones abundantes, durante el embarazo o en las recién paridas, donde el aporte de hierro es aún más necesario.
- La remolacha además contiene una gran cantidad de fibra lo que hace que a la hora de vaciar el intestino sea de gran utilidad ante problemas de estreñimiento y/o en su prevención.
- La remolacha también es muy digestiva y además tiene efecto prebiótico lo que ayuda a mejorar la flora intestinal, por lo que estamos también ante un alimento muy digestivo recomendado incluso en casos de enfermedad intestinal como colon irritable, colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn.
- Gracias a su elevado contenido en ácido fólico, B9, vitamina estupenda para mantener a raya la buena salud de uñas, piel y cabello, con efectos rejuvenecedores, haciendo así que estos gracias al consumo de remolacha luzcan sanos y fuertes.
- A nuestra protagonista de hoy también se le atribuyen ciertas propiedades antidepresivas.
- A nivel de calorías, la remolacha nos aporta muy pocas calorías, concretamente en torno a unas 43 kcal por cada 100 gramos. Estas calorías vienen mayoritariamente de sus hidratos de carbono, pero al tratarse de un alimento rico en fibra estos se absorben lentamente. El contenido de azúcar de una remolacha roja es similar al de, por ejemplo, media manzana.
- La remolacha como decíamos, es rica en hidratos de carbono por lo que estamos ante un alimento energético, con calorías, además, fácilmente asimilables, así la remolacha es un genial aliado en dietas de adelgazamiento.
La remolacha para cuidar del hígado
Como verás, estamos ante un alimento, la remolacha, rico en antioxidantes, justo lo que necesita nuestro hígado para desintoxicarse, depurarse y mantenerse sano.
La remolacha gracias a sus efectos depurativos se hace esencial en dietas para enfermos de hígado graso, cirrosis o hepatitis.
En el siguiente enlace encontrarás la forma de preparar un rico jugo de remolacha y limón para ayudar al hígado a quemar grasas.
No nos extrañe encontrar nuestra orina teñida de color rojo o rosáceo tras su consumo, es normal debido a su potente pigmentación.
La remolacha para cuidar nuestro corazón
Hace unas líneas, te explicábamos como la remolacha era una magnífica fuente de ácido fólico.
Pues bien, el ácido fólico es, además, el encargado de nutrir nuestro corazón y gracias a la remolacha y sus efectos antioxidantes podemos estar bien cuidados en este aspecto.
La remolacha, además, mejora la potencia y la fuerza muscular del corazón gracias a su alta concentración de nitratos, otro punto a su favor. El cuerpo convierte los nitratos en óxido nítrico y este elemento nos ayuda a aumentar el metabolismo y el volumen de los vasos sanguíneos. Por lo tanto, no solo quema más grasa sino que además la sangre circula mejor. Podemos encontrar estos nitratos tanto en las remolachas como en las espinacas o en cualquier otro vegetal de hoja verde.
Alimento cardiosaludable, rico en fibra, antioxidantes, potasio, vitaminas del grupo B (no B-12 ojo), nos beneficia a la hora de disminuir el colesterol, reduce la hipertensión y nos limpia las arterias, reduciendo la posibilidad de accidentes cardiovasculares como infartos o ictus.
Puedes leer más sobre sus propiedades en el siguiente enlace.
¿Cómo cocinamos una rica crema de remolacha? Preparando la remolacha
Para cocinar una crema de remolacha lo primero que debemos hacer es cocer nuestras piezas de remolacha.
Para realizar esta función, debemos:
- limpiar la pieza,
- cortar las hojas que reservaremos
- y lavar la raíz bajo el grifo de agua frotando suavemente con un cepillo de cocina para asegurarnos que eliminamos toda la tierra.
Una vez tenemos la remolacha limpia, la ponemos dentro de una cazuela con abundante agua hirviendo durante unos 15 minutos, dependiendo de la pieza, hasta que esta esté tierna.
Podemos comprobar que está en su punto pinchando la remolacha con una puntilla o cuchillo fino.
Una vez cocida la pelamos, tiene una piel muy fina que también podéis pelar antes de cocer, pero os será más costoso de este modo ya que la raíz en crudo es bastante más dura.
Si no queréis acabar con las manos teñidas de morado os aconsejamos usar guantes de cocina durante todo el proceso.
Sobre todo a la hora de pelarla, ya que su tinte es bastante fuerte y aunque después te laves las manos este permanecerá durante horas.
Un truco sencillo que solemos usar para poder eliminar el tinte de la remolacha de la piel de forma además natural es frotarte las manos con la parte blanca de una monda de naranja, aclarar con agua y habrás eliminado el color de tu piel.
Si por accidente has terminado con alguna mancha de remolacha en la ropa, no te quedará otra que tratar la mancha con rapidez, remojando y lavando con detergente la misma, dejándola en remojo en caso de no resultar y/o tratándola con soluciones a base de blanqueadores o lejía, así que, ponte el delantal y ¡al lío!
Por supuesto, otra opción es utilizar la remolacha ya cocida y pelada, como la que nos ofrece Huercasa.
Una vez tenemos las piezas de remolacha cocidas, preparar nuestras cremas será rápido, sencillo y apenas causaremos estragos en la cocina.
Crema de remolacha básica para mantener sano hígado y corazón
Necesitaremos para 4 raciones:
- 4 remolachas medianas previamente cocidas
- 1 vaso de bebida vegetal al gusto, la de arroz queda muy rica
- 1 cucharadita de sal yodada
- 1/2 cucharadita de romero seco
- 1/4 cucharadita de jengibre en polvo
Tal sencillo como pasar todo por la batidora hasta lograr una textura sedosa, calentamos antes de consumir y para completar el plato a la hora de servir podemos poner unos germinados, un topping de semillas de calabaza, o un puñado de semillas de chía.
Una receta 100% vegetal que podemos usar como base de un sinfín de recetas.
Una opción, rápida y limpia, es comprar la remolacha ya cocida y lista para consumir, base desde la cual también podéis utilizar para hacer otras cremas, dándoles un toque diferente en cada preparación.
Otras cremas de remolacha, deliciosas que podemos cocinar son, toma nota:
Crema de remolacha y calabaza
Para 4 raciones:
- 4 remolachas medianas -cocidas-
- 4 trozos medianos de calabaza -cocida-
- 1 zanahoria mediana -cocida-
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
- 1 cucharadita de sal marina.
- 2 cucharadas de uvas pasas (recomendado).
- Caldo de verdura o agua en su defecto.
Introducir todos los ingredientes, salvo las uvas pasas, en la batidora y batir hasta que quede meloso, agregando caldo al gusto hasta tener el punto deseado.
Poner por encima las uvas pasas a la hora de servir.
Esta crema es una de nuestras preferidas, también lo es de los más pequeños de la casa, y es que podría tratarse incluso de un postre, dado el dulzor natural de la misma. Prueba, y nos cuentas qué te parece.
Crema de remolacha con queso mascarpone
Para preparar esta receta para 4 personas, necesitas lo siguiente:
- 6 remolachas medianas -cocidas-
- 1 tarrina de 150gr. de queso mascarpone.
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra.
- 1 cucharada de sal marina.
- 1/2 cucharada de orégano seco.
- Caldo de verdura o pollo. Agua en su defecto.
Batimos todos los ingredientes agregando caldo o agua hasta que la textura sea melosa.
Si reserváis un poquito de crema de mascarpone hasta el momento del emplatado podéis hacer dibujos sobre la crema usando un palillo de cocina.
Otra de nuestras cremas de remolacha preferida es esta en la que usamos y potenciamos el sabor usando crema de queso mascarpone, además es una crema que puede quedar muy vistosa gracias a su colorido y a la opción de poder decorar por encima con el queso mascarpone.
Toma nota del siguiente enlace en el que encontrarás más recetas ricas en la que la remolacha es la protagonista.
Las cremas de remolacha una vez cocinadas las puedes guardar en un recipiente de cristal con tapa en la nevera durante 3-4 días, si bien lo recomendable es consumirla en el momento para aprovechar sus nutrientes.
Otra opción es congelar raciones para consumirla cuando más te apetezca, dejándola descongelar después dentro de la nevera poco a poco.
Para darle un toque distinto a tus platos al mismo tiempo que enriqueces el plato, prueba a poner sobre tu crema diferentes “toppings”, los frutos secos picados o las semillas molidas son nuestros favoritos. Y si le agregas un puñado de legumbre cocida tendrás un plato súper completo en tiempo récord.
Todas las cremas puedes consumirlas tanto en caliente como en frío. Así que, que la temperatura no sea un inconveniente porque están riquísimas de cualquier modo y ahora que llega el buen tiempo son estupendas para llevar a la playa o piscina y disfrutar de un tentempié saludable.
Y si no tienes tiempo, siempre puedes optar por comprar tu crema de remolacha ya preparada, como la de Huercasa, y personalizarla a tu gusto.
Esperamos que hayas disfrutado de este artículo tanto como lo harás de la crema de remolacha, disfrútala y ya sabes, ella cuidará de tu hígado y corazón.
Con unas sencillas pautas, unos mínimos conocimientos y algo de organización, comer saludable no nos llevará apenas tiempo. Invirtamos en nuestra salud y disfrutemos de la remolacha.